Thursday, December 27, 2012

El Dispensacionalismo (parte 3)




FUNCION DE ISRAEL EN LA HISTORIA BIBLICA
 
Para responder la pregunta deberíamos ir al comienzo de las escrituras, y ver allí que estaba ocurriendo. Para la mayoría de los estudiosos de la biblia no es ningún problema aceptar que la revelación completa e ininterrumpida de Dios comenzó en Génesis 12, cuando Dios llama a Abraham. Me gusta citar este como el comienzo de una revelación progresiva e ininterrumpida por varias razones:
1.       Desde Génesis 12 en adelante, se puede ver a Dios tratando directamente en la historia de una manera ininterrumpida, comenzando con la vida de Abraham.
2.       Nunca antes la humanidad conoció de Dios tanto como lo empezó a conocer Abraham.
3.       El tiempo transcurrido desde Adán hasta Abraham es posiblemente mas largo en años que todo el periodo de años que narra el Antiguo Testamento, y solo se puede ver antes de Abraham a Dios tratando intermitentemente en la historia con personas en diferentes periodos de tiempos. Por ejemplo: Dios trató con Adán al principio, pero no sabemos que cantidad de años hubo desde Adán, hasta Noé. Dios trató un juicio con la humanidad en la torre de Babel, pero no sabemos que cantidad de años hubo desde Noé, hasta la torre de Babel.
Sin embargo desde Abraham, si podemos contar un registro ininterrumpido de Dios revelándose a la humanidad, luego de Abraham vemos a Dios obrando en Isaac, luego en Jacob, luego en José, luego en Moisés, luego en la nación de Israel como tal, y así hasta Jesucristo.
Entonces ¿Cuál es el propósito de Dios con escoger a Israel? Si nos referimos a Génesis 12:2-3 vemos aquí el objetivo de Dios en escoger a Israel como nación cuando dice:
Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
Cuando leo estos versos encuentro varias características por las que Dios escogió a Israel como nación:
1.       Dios se iba a dar a conocer a la humanidad, y estaba buscando una nación a través de la cual mostrar sus grandes y maravillosas obras. Esa era la razón por la que siempre se requería que el pueblo de Israel fuera distinto a todas las naciones que le rodeaban. Esa también es la razón por la cual Dios en el tiempo antiguo, mandaba que se acabara con todos los sobrevivientes de las naciones que eran atacadas por los judíos. Flavio Josefo narra en su libro “Antigüedades Judías” narra el acontecimiento cuando Alejandro Magno se encontró con Jaddua, el sumo sacerdote, y cuando Alejandro vio la vestimenta de Jaddua, dice Josefo que se postró y le adoró, cuando uno de sus generales llamado Parmenio, le pregunta la razón por la que se arrodillaba ante un hombre, cosa que nunca antes había hecho Alejandro, él le respondió estas palabras: No hice una reverencia ante él, sino ante el Dios que lo ha honrado con el Sumo Sacerdocio; pues he visto a esta misma persona en un sueño, con esta misma apariencia”[1]. De modo que este evento demuestra que la relación con Dios y el pueblo de Israel sirvió para que otras naciones conocieran a Dios, al igual que el momento en que David se enfrenta a Goliat, en el dialogo que tienen David y Goliat justo antes de la batalla David dice: Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel.
2.       En segundo lugar Dios tenía en mente desde un principio bendecir a todas las naciones de la tierra a través de Israel. Obviamente está hablando del beneficio mesiánico para toda la humanidad. Desde un principio el plan de redención universal estaba en Cristo, por eso la biblia dice que el cordero había sido inmolado desde antes de la fundación del mundo (Ap. 13:8). La nación de Israel se volvió regionalista al pensar que eran el pueblo escogido, y se vieron superiores a los demás pueblos, pero lo cierto es que Dios si les había escogido, pero para que fueran de bendición a toda la tierra.
Desde el principio Dios creó al ser humano con el objetivo de tener una relación con él, antes de la caída en Génesis 3, vemos a Dios teniendo una relación íntima con Adán y Eva al punto que ambos podían tener acceso a la misma presencia de Dios. Cuando Dios creó al hombre en Génesis 1:26 dice de la siguiente manera:
Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.
La palabra “entonces” le da un matiz al relato que creo yo, lo hace más maravilloso de lo que uno puede leer a simple vista, los primeros 25 versos del capítulo 1 Dios está creando todo, preparando un hábitat adecuado para la humanidad, luego cuando todo está listo, Dios dice, ahora es el momento de hacer lo que yo tenía pensado hacer desde un principio, hagamos entonces un hombre, alguien que sea semejante a nosotros, alguien con quien podamos tener una comunión íntima, una persona que se relacione con nosotros, y fue entonces que se creó a Adán.
Con la entrada del pecado en escena, todo se vino abajo, ya no había esa comunión íntima, ya había una separación, a través de las generaciones posteriores fue siendo mayor esa separación, el hombre se fue alejando más y más de Dios. Pablo lo explica muy bien en Romanos 1 cuando dice:
Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.
Para la época de Abraham, no había nadie disponible con quien Dios pudiera comenzar un plan de redención en la humanidad, que al mismo tiempo llevara a una restauración de la comunión perdida entre Dios y los hombres. Pero como para Dios un día es como mil años y mis años como un día, comenzó con Abraham un proceso auto revelación, que llevaría a la futura redención de toda la humanidad.  
Aun cuando la mentalidad de los hombres fue cambiando a medida que la humanidad fue conociendo a Dios, el plan en la mente de Dios siguió siendo el mismo. Redimir una humanidad pecadora, por eso Pablo escribe en Efesios 1:
dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.
Por eso el plan de Dios es uno, y siempre ha sido uno, este principio se puede ver presente en toda la revelación Bíblica. Israel fue el canal que Dios usó para darse a conocer a un mundo perdido en pecados, todas las naciones tenían que saber quién era Dios, y que esperaba de cada uno individualmente.

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